Salió a dar caminatas para luchar contra su insomnio y terminó retratando lo que nadie más se atrevería.
Un día normal en el Central Park de Nueva York estaría plagado de gente trotando, andando en bicicleta o en caminatas junto a guías turísticos. Pero el fotógrafo Michael Massaia -conocido por su afición hacia lo sombrío- decidió aventurarse a las caminatas nocturnas, a fin de lidiar con el insomnio severo que lo atormentaba.
Comenzó haciéndolo en el 2007. Siempre que el sueño tardaba, él tomaba su cámara, un abrigo, y salía a caminar por el -a esa hora- solitario parque.
“Por lo general tomaba largas caminatas por la noche, el parque siempre parecía estar llamándome. Me puse a documentarlo en sus momentos más vacíos, aislados ya veces obsesivos. El parque parece pasar por un período de metamorfosis durante esas altas horas de la madrugada y yo estaba decidido a capturar eso”.
-relata Massia en su página web.-
Después de ver sus fotografías concluirás que -en definitiva- el parque es una especie de entidad que cobra vida en las horas de la noche. 1.

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